jueves, 21 de agosto de 2008

Velvet

velvet

asa ga kuru made tomoshita akari wa kaze ni mi wo yurashite
toosugita asu hikari ga hoshikute kyandoru wo mitsumeteta

fukasugiru yoru kodoku wa itsudemo sei no jikkan wo kureta
kotae wa nai kedo kokoro ni hikari wo tomosou

konjiki no joukei ga kuro wo asa ni nurikaeteyuku
kimi no mune ni ikiru tsuyosa wo sou tashika ni ataete

I cannot wait for the morning. Because no one wants solitude.

tsunaida yubisaki sae mamoritai yo sono koe mo yureta kami mo kono te de
riyuu wa nai to shite mo asu wa kimi ni

narihibiita mezame no koe wa takaraka de
shizukana kodou mune ni himete kono yoru wo akasou
tomoshita hikari wa kokoro no yami wo sotto terashite

amaku yureta veruvetto no heya de
rou wa tsuma wo tatete kizuato wo nokoshi
yuruyaka ni adeyaka ni dinaa wo

asa ga kuru made kogoeta karada wa nukumori wo sagashite
suberikonda shiatsu no sukima wa biroodo

konjiki no joukei ga kuro wo asa ni nurikaeteyuku
kimi no mune ni ikiru tsuyosa wo sou tashika ni ataete

I cannot wait for the morning. Because no one wants solitude.

tsunaida yubisaki sae mamoritai yo sono koe mo yureta kami mo kono te de
riyuu wa nai to shite mo asu wa kimi ni

kowaresouna zouka no bara wa azayaka de
terasareteitai akai yume ni kono heya wo someyou
tomoshita hikari wa kokoro no yami wo sotto terashite




Terciopelo

Hasta que amanezca, la luz encendida se mecerá en el viento.
El mañana tan lejano, deseando la luz observada de una vela.

De noche se profundiza la soledad que siempre da ese sentimiento crudo.
No hay respuestas, pero la luz en mi corazón está encendida.

El paisaje dorado volverá a pintar la oscuridad en la mañana.
Seguramente, en tu pecho, te dará fuerzas para vivir.

No puedo esperar la mañana. Porque nadie quiere estar sólo.

Sólo quiero proteger nuestro destino, tu voz y tus cabellos revueltos, con mis propias manos.
Incluso sin motivo alguno, mañana, para ti.

La voz al despertar que había sonado ruidosamente.
Los latidos silenciosos escondidos en el corazón, revelarán esta noche.
La luz encendida, ilumina lentamente la oscuridad de mi corazón.

Meciéndose lentamente en la habitación de terciopelo.
La cera expone sus garras, dejando cicatrices.
Clemente y embrujada, esta cena (fiesta) es…

Hasta que amanezca, mi cuerpo congelado buscará tu calidez.
El hueco de las hojas en que me deslicé era aterciopelado.

El paisaje dorado volverá a pintar la oscuridad en la mañana.
Seguramente, en tu pecho, te dará fuerzas para vivir.

No puedo esperar la mañana. Porque nadie quiere estar sólo.

Sólo quiero proteger nuestro destino, tu voz y tus cabellos revueltos, con mis propias manos.
Incluso sin motivo alguno, mañana, para ti.

Las destrozadas rosas artificiales están en la brillantez.
Me gustaría ser iluminado, con mis sueños rojos, tiñendo esta habitación.
La luz encendida, ilumina lentamente la oscuridad de mi corazón.

No hay comentarios: